
No es comentario de viejos, ni cliché despectivo a la generación actual, pero sucede que de verdad que se han perdido lo que antaño nuestros padres solían llamar "las buenas costumbres" que daban la elegancia de la buena educación en quien las adoptaba como normas de vida. En esta publicación dedico unas reflexiones al respecto, que espero sean escuchadas y puestas en práctica por quienes son asiduos seguidores de este blog.